¿Sabes qué se define como dolor torácico y cuál es su origen?
Se define como dolor torácico cualquier molestia o sensación anómala presente en la región del tórax situada por encima del diafragma. Dicho dolor puede tener su origen en los diversos tejidos de la pared torácica y en las estructuras intratorácicas.
DOLOR TORÁCICO AGUDO. ENFOQUE PRÁCTICO
Se define como dolor torácico cualquier molestia o sensación anómala presente en la región del tórax situada por encima del diafragma. Dicho dolor puede tener su origen en los diversos tejidos de la pared torácica y en las estructuras intratorácicas.
El dolor torácico constituye un motivo de consulta frecuente para el médico general, el internista y el cardiólogo. El objetivo de la evaluación inicial es descartar la posibilidad de enfermedad coronaria y de otras condiciones clínicas que amenacen la vida del paciente.
La cardiopatía isquémica aguda (infarto de miocardio, angina inestable, angina de reciente aparición) representa la causa más frecuente y potencialmente fatal de dolor
torácico. Los pacientes con infarto agudo de miocardio que son dados erróneamente de alta del servicio de urgencias tienen una mortalidad a 30 días del 25%, que es, por lo menos, el doble de la que presentan los pacientes que son admitidos en las instituciones de salud.
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Los médicos pueden utilizar algoritmos elaborados para mejorar la estratificación de los pacientes con dolor torácico, que junto con los nuevos marcadores séricos de lesión cardiaca, son fundamentales en la evaluación de estos pacientes en los servicios de urgencias.
Etiología
1. Enfermedades cardiovasculares:
• Infarto de miocardio (IM).
• Angina de pecho, angina inestable.
• Enfermedad valvular (prolapso de válvula mitral-estenosis aórtica)
• Aneurisma disecante de aorta.
• Pericarditis aguda.
• Arritmias cardiacas y trastornos de la conducción.
2. Enfermedades pulmonares:
• Embolia pulmonar.
• Neumonía.
• Neumotórax y hemotórax.
• Pleuresía.
3. Dolor musculoesquelético:
• Inflamación de la articulación esternocostal.
4. Enfermedad gastrointestinal:
• Reflujo gastroesofágico.
• Esofagítis.
• Colecistitis.
• Hernia hiatal.
• Úlcera péptica.
Evaluación clínica
La evaluación del dolor torácico debe iniciar se con la historia clínica enfocada en las características del dolor, así: si el dolor es opresivo, irradiado a la mandíbula o al miembro superior izquierdo, es sugestivo de enfermedad coronaria; si se irradia a la espalda debemos descartar disección de aorta, si, por el contrario, tiene características pleuríticas, nos orientan a embolismo pulmonar o neumonía. Es importante aclarar si el dolor se presentó en reposo o con esfuerzo, si fue de aparición súbita, si se asocia a otros síntomas como disnea o síntomas autonómicos. Se debe establecer la duración del dolor y su periodicidad. Además, se debe realizar un examen físico completo con énfasis en la evaluación del sistema cardiovascular. La ayuda diagnóstica más importante es el electrocardiograma, que debe ser tomado dentro de los 10 minutos iniciales al ingreso del paciente.
La evaluación inicial de un paciente con dolor torácico agudo debe hacer sospechar al clínico una etiología potencialmente fatal como el infarto agudo de miocardio, la disección aórtica y el embolismo pulmonar. Si es poco probable que la etiología del dolor sea un evento isquémico cardiaco, la posibilidad de condiciones pulmonares, gastrointestinales y musculoesqueléticas, así como la pericarditis y otras condiciones cardiovasculares, debe ser investigada, usual mente de manera ambulatoria excepto cuando la patología sospechada sea disección de aorta, taponamiento cardiaco o tromboembolismo pulmonar. La evidencia sugiere que los espasmos y el reflujo gastroesofágicos son responsables de un porcentaje no despreciable de dolor torácico no cardiogénico
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